El arte de la soledad y la escritura

Soy escritora, tengo trabajando en este maravilloso oficio desde hace varios años.
A veces tengo la suerte de que me paguen por mi trabajo, otras intentan aprovecharse de mi edad y no están dispuestos a pagarme por mis escritos. Gajes del oficio, supongo.
Pareciera que me estoy adueñando de un titulo que no me corresponde o que intento darme más importancia de la que mi trabajo supone. En otros casos, nunca falta escuchar esa voz anónima que incluso se molesta porque te dedicas a escribir en lugar de hacer algo más "productivo". Después de todo, hay ocasiones en las que menosprecian mi trabajo y suponen erróneamente que es sencillo trabajar en este oficio: "Hacer cuentos, eso lo hace cualquiera", "Entonces yo también soy escritor como tú y sin tanto esfuerzo".

Cualquiera puede construir una silla, después de todo solo es unir trozos de madera de manera que quede una estructura solida ¿no?. 
La verdad es que no, si usted no conoce las medidas necesarias para construir esa silla o los pasos a seguir para que la silla quede firme y con un acabado profesional (y porque esta "bien fácil" y "cualquiera puede hacerlo") su silla será más un incomodo banquillo que una silla como tal.
Se necesita una preparación previa, una instrucción que poco a poco te permita progresar en la manera en como logras describir una escena, una acción (incluso inventar toda la vida de varias personas en papel).

Otro secreto que quiero compartir aquí, es que no existe ningún truco para ser escritor. Al menos no que yo conozca. Platicando con varios escritores en una reunión de autores noveles realizada por una institución de mucha fama por estos lares, coincidimos en que todos nos acabamos las nalgas por estar horas y horas sentados frente al computador, maquina de escribir o cuaderno de raya escribiendo historias, borrando, cortando, corrigiendo, reescribiendo, editando y volviendo a escribir. Ningún truco, solo mucha pasión y muchas horas invertidas en plasmar con palabras las historias de nuestra mente.


Dedicarse a la escritura es un trabajo para aquellos que se sienten cómodos con la soledad como única compañía, quienes la conocen verdaderamente y no le temen a hacerse su amigo/a. Al menos en el proceso creativo que es donde surgen las musas, los demonios, ángeles y protectores que con compañía jamás se revelarían ante nosotros para crear con libertad.

Se puede escribir en compañía de otros, pero dígame ¿verdaderamente esta concentrado en lo que crea?
¿Les esta siguiendo el hilo de la conversación que ellos tienen? ¿Es usted un participante activo de la conversación (aporta y sigue el tema de manera continua) o solo esta sentado absorto en su mundo mientras los demás hablan entre ellos?.
Si respondió que si a todas mis preguntas entonces me disculpo, usted es un excelente escritor capaz de mantener una vida social activa al mismo tiempo que convive con amigos o familiares.
Pero será la excepción en este loco mundo de letras y escritura. La soledad es absolutamente indispensable durante el momento creativo, donde surgen las ideas de momentos inesperados, donde el silencio se adueña de la mente y vuelve a los sonidos a nuestro alrededor murmullos apenas reconocidos por nuestro sistema auditivo.

La soledad también es un arte, no lo desprecie ni le haga el feo.
Es la única que nos acompaña cuando todos nos han abandonado.



Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 3.0 Unported.

Related Posts

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores